Las aplicaciones se han visto forzada en crear medios de comunicación que ofrezcan altos niveles de seguridad debido a lo vulnerable que se ha convertido la privacidad. Los más “beneficiados” de estas nuevas tecnologías han sido los integrantes de los cárteles y del crimen de México.Debido a su elevando nivel de encriptación, apps como WhatsApp y Telegram se han convertido en las herramientas preferidas para los criminales. Son utilizadas para coordinar comunicaciones sensibles entre las que se encuentran asesinatos y envíos de droga.El periódico Milenio consultó a funcionarios del gabinete de seguridad en México quienes confirmaron que ese tipo de mensajes son prácticamente imposibles de penetrar, ya que utilizan información encriptada de un punto a otro, muy diferente a lo que ocurre con una llamada telefónica o un SMS, que pueden ser monitoreados por distintos tipos de equipos.Se ha detectado que los criminales prefieren realizar las llamadas telefónicas a través de la App y no por medio de la telefonía celular convencional. De esta manera se sienten más seguros ante la posibilidad de que sus teléfonos sean intervenidos.El diario explica que al utilizar WhatsApp como su método de comunicación principal, los narcotraficantes evitan que las agencias de inteligencia puedan interceptar sus llamadas telefónicas autorizadas por un juez, sistema que ha sido el método principal para espiar sus movimientos.El que cualquier usuario pueda “oscurecerse” ha desatado un intenso debate en Estados Unidos y otras partes del mundo, desde donde las autoridades han exigido a los gigantes de la industria como Facebook que les otorguen una forma de leer los mensajes encriptados, pero esto no ha sucedido, por lo que la batalla aún sigue vigente.Con información de InfobaeEM