¿Cuál es la mejor cobija para el frío?

Actualmente, las bajas temperaturas se han apoderado de nuestro país, pues, de acuerdo con los datos del Sistema Meteorológico Nacional (SMN), el territorio mexicano experimentará un ambiente predominantemente de frío, con heladas y temperaturas mínimas extremas en diversas zonas del país.

Asimismo, aún quedan algunos meses para que el invierno llegue a su fin, por lo que muchas personas han optado por averiguar diferentes opciones para resguardarse del frío.

5 opciones para protegerse del frío

Desde cobijas sintéticas, hasta de materiales naturales, a continuación te enlistamos algunas opciones populares para esta temporada de bajas temperaturas:

Algodón

Al ser elaboradas con materiales de fibras naturales, estas cobijas permiten que el aire circule más fácilmente, siendo una opción bastante fresca a comparación de otras. Por esta razón, pueden ser ideales para las personas que no son friolentas, ya que no son muy calientes.

Lana

Las cobijas hechas con este material suelen ser más livianas que el resto, gracias a la ligereza de sus fibras, que, por sus propiedades físicas y químicas, funcionan como un excelente aislante del frío, proporcionando calor y comodidad.

Acrílico

Precisamente de este material sintético están hechas las famosas cobijas con la imagen de un tigre de bengala. Sus fibras son obtenidas de polímeros sintéticos, hechos a base de petróleo u otros combustibles fósiles.

Son tan suaves como la lana, pero la diferencia es que, al no ser un material natural, no es muy transpirable, así que es ideal para retener el calor y resguardarse del frío.

Franela

Este material está elaborado con 50% de algodón y 50% de poliéster, por lo que es bastante suave, y a su vez resistente. Asimismo, gracias a la combinación de fibras naturales y sintéticas, las cobijas de franela son una excelente opción para proporcionar calor durante la temporada de frío.

Microfibras

Estas cobijas son hechas de otro material sintético, elaborado a base de poliéster o nailon, y cuyas fibras llegan a ser hasta 5 veces más delgadas que un cabello humano.

Su textura es suave y son muy buenas para mantener el calor, a la vez que son hipoalergénicas, siendo una excelente opción para las personas con problemas respiratorios o de alergias, como el asma.