“Dásela al niño, dásela al niño”, “pónchalo, pónchalo”, “Sultanes, Sultanes…” son frases que en esta ocasión no se escucharon en el estadio de Beisbol Monterrey. El silencio en las gradas fue la constante, la pandemia por el Covid-19 obligó a jugar sin público, pero con la entrega enorme del corazón de los jugadores.En el terreno de juego los 10 protagonistas, nueve del cuadro defensivo y el bateador, hacían lo propio: daban espectáculo deportivo. En las gradas, la ausencia del público dolía y el silencio pesaba, casi como la esperanza de una estrella que espera la ovación del ausente.El juego empezó puntual, en un horario atípico (16:00 horas), tan diferente como ha sido este 2020. Inició la temporada 2020-2021 de la Liga Arco Mexicana del Pacifico, la segunda campaña para Sultanes de Monterrey en el invierno.Previo al grito de “playball”, el secretario de Salud del Gobierno del Estado de Nuevo León, doctor Manuel de la O, lanzó la primera bola para inaugurar el torneo y es que la serie ante los Charros de Jalisco es en honor a los doctores y personal que están en la primera línea de combate del SARS CoV-2.Las largas filas de gente, el tráfico y la euforia de la gente de una inauguración serán compensados en el terreno de juego con la emoción del Rey de los Deportes.Ha iniciado la Liga Arco Mexicana del Pacifico y la tradición en Sultanes continúa…DP