La pasión del clásico final en la Concacaf Liga de Campeones se vive también al interior de los Sultanes.El regiomontano Ramiro Peña, aficionado de los Rayados, y Ramón Ríos, seguidor de los Tigres, apostaron un jersey personalizado para el ganador del derbi que definirá el boleto al Mundial de Clubes.Aunque La Pandilla ganó 1-0 de visitante en la “ida”, Ramiro admitió que aún queda mucho para definir al ganador de la final.El ex jugador de los Yanquis confía en que el Monterrey podrá levantar el trofeo de campeón…si no sale a replegarse y a cuidar la ventaja.“Digo, no se ha terminado… Tigres juega muy bien, los Rayados no se tienen que descuidar, simplemente tienen que seguir haciendo su juego y que no se echen para atrás, nomás”, expuso Ramiro.¿Es el momento de la revancha?“Sí, sí tienen que levantar la copa este año, vas a ver que se va lograr”.El segundo bate de los Sultanes admitió que le tocó perder una apuesta con el pitcher Edgar González en la final pasada de Liga, que los Rayados perdieron en casa en diciembre del 2017.CONFÍA RÍOSAunque el panorama luce complicado, Ramón Ríos dijo tener confianza que Tigres podrá remontar el marcador adverso. “La Pulpa” Ríos es originario de Guaymas. Lleva 10 años en Sultanes y desde su llegada a la ciudad ha sido seguidor de los Tigres.“Me tocó ir al juego pasado (la ida) y vi un partido muy parejo… yo me hice Tigre desde que llegué acá y espero que otra vez se vuelva a ganar en el estadio de los Rayados”, indicó el segunda base.¿Se ve difícil el panorama?“Es complicado pero se de la calidad del equipo que tienen los Tigres, tienen muy buenos jugadores y se que en estos momentos sacan la casta y eso es clave para esto”, indicó Ríos.“Como te digo, el 1-0 no quiere decir que esto ya se terminó como te digo los dos equipos tienen muy buenos jugadores y todavía la moneda está en el aire, un gol no es nada y esperemos allá en el estadio de los Rayados poder ganar”.Como en todos los hogares de Nuevo León, en la familia de los Sultanes también estarán atentos al desenlace de la gran final de la Concachampions.