El proceso de Gerardo Martino como entrenador de la Selección Mexicana trajo de la mano a la sensación Tricolor: Carlos Rodríguez, el juvenil de Rayados de Monterrey quien se ganó la confianza del estratega argentino desde su primera convocatoria, la del microciclo que se realizó en el Centro de Alto Rendimiento antes de encarar la concentración para esta Fecha FIFA.Con solo 15 partidos en la Primera División, Rodríguez destacó por su dinámica con el balón, el nivel mostrado en los entrenamientos y la personalidad en la concentración con el Tricolor hizo que el Tata Martino lo debutara con el Tri Mayor en el juego amistoso contra Chile en la ciudad de San Diego."Al final del partido el profe me felicitó por mi debut y antes me dijo que disfrutara, que estuviera tranquilo y que hiciera lo que sé hacer", dijo el canterano de Rayados.La carrera de Charly ha ido en ascenso en menos de un año, pues cuando estuvo en la Sub-20 de Monterrey recibió la invitación de Luis Ernesto Pérez para jugar con el Toledo, club del cual es accionista el exrepresentante, Jorge Berlanga.La idea era que tanto él como su compañero, Obed Esaú, fueran al balompié ibérico para poder tener un mejor fogueo en un futbol diferente y así creciera en todos los sentidos."En un principio queríamos llevar jugadores jóvenes mexicanos con nosotros y hablando con los equipos se abrió la posibilidad de hacer un acuerdo con Monterrey; Luis (Ernesto Pérez) los conocía y llegaron ya con el torneo empezado y a Charly se le veía una calidad que llamaba la atención”, dijo entrevista con Mediotiempo Berlanga.Lucho Pérez ya conocía las habilidades de Carlos, luego de verlo en su última etapa como jugador de Rayados, pues el joven era considerado en ocasiones para entrenar con el primer equipo y por eso pidió que fuera él uno de los dos elegidos para vivir la experiencia en Europa."Porque era un jugador con mucha calidad en el medio campo o como media punta, quizás le faltaba dinámica e intensidad, nos hizo dudar un poco sobre si se iba a adaptar, pero al final esa era la idea que fueran agarrando esa dinámica en una categoría como lo es la Segunda División B"."Al principio el técnico, Onésimo Sánchez, le insistió mucho en ese tipo de cosas en la intensidad y se fue adaptando pero las características eran de un jugador de medio campo que le gustaba ir mucho al frente y lo teníamos en la posición detrás de los delanteros y luego terminó en la posición que hoy ocupa, que es de doble contención con mucha salida".Por otra parte Israel Castro, elemento que fue su compañero de equipo en ese año en el que estuvo en Toledo y que tuvo una buena trayectoria en la Liga MX con Pumas, Cruz Azul y Chivas, detalló el crecimiento que ve él en los últimos meses."La experiencia en la cuestión futbolística es un buen cambio por la forma de competencia, el entrenador le pedía cosas diferentes que quizás no había visto y vivir esta experiencia significa una lucha con él mismo para cumplir un sueño", dijo el exseleccionado y mundialista en Sudáfrica 2010."Cuando lo conocí decía que era un jugador que podía estar en un equipo de mayor rango, porque yo le veía muchas condiciones y esto lo está confirmando en su regreso".Para el Apertura 2018 se terminó el préstamo con el Toledo y Diego Alonso le empezó a dar oportunidades en el primer equipo, primero debutándolo en la Copa MX y después en el máximo circuito, donde su calidad ya lo hizo ganarse la titularidad.