El delantero Carlos Tévez, jugador de Boca Juniors, aseguró que su club estaba siendo obligado a jugar la final de vuelta de la Copa Libertadores, que finalmente fue suspendida para mañana a las 17:00 horas de Argentina (14:00 del Centro de México).Cabe destacar que antes de que llegara el autobús de Boca Juniors al Estadio Monumental, el vehículo fue atacado por aficionados de River Plate, lo que provocó heridas en jugadores y posteriormente la postergación y suspensión del encuentro.Pablo Pérez fue uno de los jugadores más lastimados, pues pedazos de vidrio cayeron en su ojo izquierdo; al respecto, Tévez no sabe todavía si el jugador será operado o no.“No nos podíamos ir de la cancha porque le daban la copa a River, nos mentalizamos a jugarla e incluso nos cambiamos tres veces el uniforme; si no salíamos a hablar los referentes, el partido se estaría jugando”, reiteró el argentino.Asimismo, Tévez indicó que el trato de la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol) ha sido diferente entre ambas escuadras, pues si las acciones hubieran pasado en el estadio boquense, “River ya tendría la copa”.El “Apache” también aseguró que nadie de River Plate se acercó a preguntar cómo estaban los jugadores de Boca Juniors; el único que lo hizo fue el técnico de los "millonarios", Marcelo Gallardo, pero siete horas después de los hechos.SR